La enfermedad de las encías es una infección de los tejidos que rodean y sostienen los dientes. Es una de las principales causas de pérdida de dientes en adultos. Como la enfermedad de las encías suele ser indolora, es posible que no sepa que la padece. También conocida como enfermedad periodontal, la enfermedad de las encías está causada por la placa, la película pegajosa de bacterias que se forma constantemente en nuestros dientes.
Cuanto antes se trate la enfermedad de las encías, mejor. La fase inicial de la enfermedad de las encías se denomina gingivitis. Si padece gingivitis, las encías pueden enrojecerse, inflamarse y sangrar con facilidad. En esta fase, la enfermedad aún es reversible y normalmente puede eliminarse con una limpieza profesional en su consulta dental, seguida de un cepillado diario y el uso de hilo dental.
La enfermedad avanzada de las encías se denomina periodontitis. La periodontitis crónica afecta a casi la mitad de los adultos mayores de 30 años en Estados Unidos. Puede provocar la pérdida del tejido y el hueso que soportan los dientes y agravarse con el tiempo. Si se agrava, los dientes se aflojan y empiezan a moverse en la boca. Es la forma más común de periodontitis en adultos, pero puede aparecer a cualquier edad. Suele empeorar lentamente, pero puede haber periodos de progresión rápida.
4 signos de enfermedad de las encías:
Su sonrisa puede parecer sana, pero algo bastante poco saludable puede estar ocurriendo sin que se dé cuenta. La enfermedad de las encías puede estar extendiéndose agresivamente sin que te des cuenta. La enfermedad de las encías daña el tejido y el hueso, lo que puede provocar la pérdida de dientes, y está causada por la acumulación de placa debido a una higiene bucal deficiente. Los siguientes son signos que le ayudarán a detectar los síntomas de la enfermedad de las encías, incluso en las fases iniciales:
- Hemorragia: A menos que te estés cepillando o usando hilo dental con demasiada fuerza, normalmente tus encías no sangrarán. Si sangran con una presión leve o moderada, puede ser señal de que el tejido de las encías está inflamado y débil debido a una infección.
- Inflamación y enrojecimiento: Si notas que tus encías están hinchadas o enrojecidas, podría deberse a una inflamación. La inflamación es la forma que tiene el organismo de responder para combatir una infección, pero si se prolonga, el cuerpo empieza a dañar el tejido en lugar de protegerlo.
- Abscesos: Son zonas de las encías donde la infección se ha aislado. Suelen estar más inflamadas que el tejido gingival circundante porque están llenas de pus. Son sensibles al tacto y deben ser examinadas por su dentista si los síntomas se prolongan durante más de unos días.
- Dientes flojos o que se mueven: Los dientes que han cambiado de posición o se han aflojado en las encías son signos de que la enfermedad de las encías está avanzando. Esto ocurre porque la encía y el hueso que sujetan los dientes son débiles y pierden fijación. Se recomienda un tratamiento inmediato por parte del dentista para no perder todos los dientes.
Si nota alguno de estos signos/síntomas, debe acudir a un profesional lo antes posible para someterse a un examen. Cuanto antes pueda su dentista diagnosticar y comenzar el tratamiento de la enfermedad de las encías, menos daño y daño permanente sufrirán sus dientes y encías.