¿Duele la cirugía de implantes dentales?

Muchos de mis pacientes expresan su preocupación por si recibir un implante es doloroso. Dado que un implante se parece a un tornillo de metal, es comprensible sentir aprensión ante el procedimiento. Sin embargo, la experiencia es mucho menos desalentadora de lo que parece. Nos aseguramos de que esté completamente anestesiado antes de que comience el procedimiento, por lo que no sentirá ninguna molestia durante la cirugía. Es importante tener en cuenta que la mandíbula, donde se coloca el implante, es muy diferente de los dientes. Los dientes son muy sensibles a la temperatura, la presión y otros estímulos debido a su extensa inervación nerviosa. En cambio, el hueso maxilar no tiene tanta inervación, por lo que las intervenciones en el hueso son menos sensibles que en los dientes.

A pesar de los temores iniciales, la mayoría de los pacientes se sorprenden durante la cirugía de implantes. A menudo no se dan cuenta de que se han colocado los implantes hasta que les informo de que el procedimiento ha finalizado, a veces después de insertar seis u ocho implantes, ante lo cual reaccionan con sorpresa por la rapidez y facilidad del proceso.

En los casos en los que se han extraído dientes previamente y la zona ha cicatrizado, el sangrado es mínimo. Esto se debe a que utilizo una pequeña fresa piloto para crear una abertura precisa en la encía para el implante, lo que permite una inserción sencilla y limpia. En el postoperatorio no suelen ser necesarios puntos de sutura y el proceso de cicatrización se acelera considerablemente en comparación con otros procedimientos dentales. Aunque proporciono medicación para el dolor, muchos pacientes sólo la necesitan el primer día o la primera noche, y a partir de entonces sólo sienten un ligero dolor.

La aprensión que rodea a la cirugía de implantes dentales es comprensible, pero la realidad es que los avances en las técnicas y la anestesia hacen que sea una experiencia relativamente cómoda con mínimas molestias postoperatorias.